viernes, 7 de mayo de 2010

La sonrisa volvió al rostro de Magglio

En 2009 a la esposa del falconiano le fue diagnosticado cáncer pero ya se encuentra bien.

CARACAS.- Magglio Ordóñez está retomando lo números a los que está acostumbrado, haciendo olvidar su pésimo desempeño en la temporada pasada en la cual, si bien bateó para .310, tan sólo pudo sacar 9 pelotas y empujar 50 rayitas a la goma.

En 28 encuentros disputados en 2010 el falconiano ya acumula 4 estacazos de vuelta completa y 20 fletes, lo que llevó al mánager de Detroit, Jim Leyland, a decir que este es el mejor Ordóñez que ha visto en años. ¿La razón de este drástico cambio? A la esposa de Magglio, Dagly, se le diagnosticó cáncer el año pasado, pero ahora ya se encuentra bien.

Dagly tiene 15 años casada con el pelotero y su matrimonio ha dado fruto a tres hijos, durante 2009 se padeció un fuerte dolor de garganta y que resultó ser la peligrosa enfermedad.

"Siempre se oye sobre el cáncer pero nunca le prestamos atención porque es una cosa que uno piensa que nunca te va a pasar, pero puede pasar a cualquiera”, dijo el outfielder de Detroit a MLB.

Cuando Dagly entró en tratamiento tuvo que dejar el hogar por un tiempo, lo que complicó las cosas para Magglio, quien además de jugar béibol debía hacerse sólo a cargo del hogar, eso quizás mermó su producción en su trabajo, su mente estaba en otra parte y no precisamente en los campos de pelota.

"La cosa que se tiene que entender es que la vida y la familia son primero", afirmó el falconiano. “No es fácil cuando se está trabajando o se está jugando béisbol tratar de concentrarse mentalmente. El año pasado en el comienzo de la temporada tuve problemas. Mi mente no estaba en el béisbol”, sentenció Ordóñez.

Dagly de Ordóñez se sometió a dos cirugías para frenar el cáncer, ahora debe hacerse exámenes cada seis meses para descartar cualquier posibilidad de que el padecimiento vuelva a aparecer.

"No es fácil. Para las personas que pasan por el cáncer es muy difícil", dijo el jardinero. "Ellos tienen que luchar con la enfermedad, tienen que pasar por el hospital y pasar por todas las pruebas. No es fácil. Pero ya sabes, un mucha de esa gente es muy fuerte así que luchan y sobreviven," confesó.

Para el 2010 Magglio no tiene tanta preocupación como la tuvo en el pasado, pero esta experiencia le dejó una sabía lección: “Uno es un ser humano así que todo puede pasarte. Hay que apreciar la vida todos los días", concluyó el jugador.

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